Estoy en el edén, con una hermosa Eva. Corremos y jugamos desnudos por un interminable bosque, disfrutamos de nuestros cuerpos y de deliciosas frutas que caen de los arboles. Somos felices.
En medio del verde descampado aparecen dos autos estacionados. Un convertible rojo y un deportivo negro. Eva toma el convertible, yo el otro. Súbitamente estamos vestidos y manejando velozmente por un carretera.
Llegamos a un campo militar cercado, en la posta de la puerta le digo a Eva "no te preocupes, soy amigo del jefe". Saludo al gendarme, me responde - Pase señor, lo estamos esperando -
Estamos dentro de una mansión, en una especie de recepción o cóctel. saludo a muchos militares llenos de insignias y a hombres de traje con aires de importante. Me doy cuenta que estamos planeando alguna clase de golpe. No logro descubrir si es una revolución de izquierda o un levantamiento de derecha.
Veo a Eva irse por la puerta.
Todos se sientan en largas mesas de madera. Estas están completamente vacías salvo por un Boul lleno de confites (tipo M&M). Alguien lanza un confite y en la otra punta otro lo ataja con la boca. La secuencia se repite muchas veces, todos los militares y hombres de traje se ríen y se divierten jugando con los confites hasta que alguien le erra, le pega en el pecho y sale sangre.
La reunion se convierte en una batalla campal, los hombres corren de un lado al otro, se esconden detras de las mesas, lanzando mortales confites, la sangre brota por todos lados.
Despierto.
Fin del sueño.
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